Hace cincuenta años, al dar a luz por primera vez como madre joven, pensé que no podía haber mayor dolor. Pero pronto se olvidó cuando sostuve a mi hermoso bebé en mis brazos. Lo llamé Julián.
Cuan equivocada estaba, ahora sé que hay un dolor mayor.
Siento el dolor desgarrador de ser la madre de un periodista ganador de múltiples premios que tuvo el coraje de publicar la verdad sobre la corrupción y graves delitos cometidos al más alto nivel por gobiernos del mundo.
He sufrido el dolor de ver cómo mi hijo era difamado a nivel mundial por publicar verdades inobjetables.
He sufrido el dolor de ver a mi hijo, que arriesgó su vida para dar a conocer la injusticia, arrastrado ante tribunales negándosele una y otra vez un proceso justo.
He sufrido el dolor de ver cómo mi hijo, durante estos años de detención, se consume lentamente sin asistencia médica.
Sufro la angustia de ver a mi hijo torturado cruel y psicológicamente buscando romper su inquebrantable espíritu.
Vivo la pesadilla constante que mi hijo sea extraditado a los Estados Unidos, enterrado vivo e incomunicado por el resto de su vida.
Vivo el temor constante de que la CIA lleve a cabo sus planes de asesinarlo.
He vivido la inmensa tristeza de ver su cuerpo frágil y exhausto por un estrés crónico, desplomarse de un ataque cerebral en la última audiencia ante el tribunal.
Es un trauma para todos ver cómo una superpotencia vengadora usa su poder ilimitado para intimidar y destruir a un individuo indefenso.
Deseo agradecer a todos los ciudadanos honrados que a lo largo y ancho del mundo protestan contra la brutal persecución política de que es objeto Julián.
Por favor, sigan alzando sus voces para que este clamor sea escuchado por los políticos de sus países.
La vida de mi hijo está en vuestras manos.
Christine Assange
Santiago, diciembre 27, 2021
Duele la indiferencia con que se ha tratado el caso de Assange en Chile… Deberíamos protestar, reclamar. No podemos permanecer indiferentes a poder brutal del imperio
Me gustaMe gusta
Son indiferencias que nos retratan. ¿Tenemos realmente interés cuando nuestros presidentes reciben ordenes desde el
imperio que se ejecutan sin reparos? Siempre fue así. Por eso me entran grandes dudas cuando todo parece moverse y
revolverse para que todo quede en su lugar. Después de este revoltijo capaz, como dicen los gringos, que estaremos en
square one.
Me gustaMe gusta